Todos lo hemos oído alguna vez: "El cliente siempre tiene razón". Y de alguna forma, es cierto. El cliente suele tener razón sobre lo que piensa de tu servicio, pero ¿y si pudieras llevar este principio a otro nivel? ¿Y si no sólo escucharas a tus clientes, sino que además aprendieras de ellos? Ahí es donde entran en juego los acuerdos de nivel de experiencia (XLA).